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Kim escapó del país desilucionado por las horribles condiciones y el hambre masivo. “Cada día escuchaba noticias de ejecuciones en más de 20 campos de concentración políticos por toda norcorea y noticias de 3 millones de personas muriendo de hambre”, dijo Seung-min.
Kim enfrentó fuertes golpizas y sus dedos fueron quebrados. Eso fue el resultado de huir del país y abandonar el ejército donde tenía el rango de capitán. Kim había huído a China donde conoció a unos cristianos, pero fue hasta que regresó a Norcorea, capturado por las autoridades Chinas, que puso su fe en Jesucristo.“Cuando regresé desde China a Norcorea había un puente, al cruzar el puente, sabía que moriría. Sabía que ese era mi destino. quería cantar una alabanza, pero no podía recordar ninguna canción de alabanza al Señor, así que me prometí que si vivía y escapaba de nuevo aprendería canciones de alabanza y las memorizaría”, agregó.
Cuando Seung-min servía al ejército norcoreano escribió poemas sobre la grandeza del líder Kim Il-sung. ahora él está escribiendo canciones de alabanza al Dios de los cielos. Tras ser sentenciado a muerte, Kim fue trasladado en tren a la capital por los mismos hombres con quienes antes servía.
“Al tercer día sentí la presencia de los hombres que me vigilaban por detrás y me dí cuenta que uno de ellos estaba inseguro. Era un desorden pues no habían limpiado en tres días. Cuando el soldado titubeó supe que era mi único chance de escapar. Sin pensarlo salté del tren en movimiento a través de la ventana”, expresó.
El regresó a China y se reunió con los cristianos que había conocido. Kim pasó los siguientes dos años y medio trabajando en una fábrica, creciendo en su relación con Jesús y copiando la Biblia entera antes de ir a Corea del Sur en 1999.
El ha estado activo tratando de alcanzar a los norcoreanos con el mensaje de jesús mediante un programa de radio por onda corta que se enfoca en la persecución.
“Norcoea es un imperio del mal. El mundo no tiene nada que hacer. Ellos no tienen principios de ley, lanzan misiles, venden drogas y falsifican dólares. La única vía es derretir los corazones norcoreanos con amor y el evangelio”, expresó Seung-min.
Kim también lidera la recién inaugurada universidad subterránea en Seúl, Corea del Sur, en alianza con La Voz de los Mártires.
“Los norcoreanos tienen mejores ideas sobre cómo alcanzar a su país. La universidad subterránea no los entrena en una metodología particular de evangelismo, sino que va a lo más fundamental y trata de ayudarlos a discernir lo que dios los está llamando a hacer, y ellos salen con cosas sorprendentes, mucho más efectivas que cualquier cosa que tengamos en occidente”, comentó Eric Foley, de La Voz de los Mártires.
Otros proyectos de La Voz de los Mártires incluyen lanzar globos llenos de tratados evangelísticos y contrabandear comida y recursos a esa nación tan asilada.