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EE.UU-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) La semana pasada, el Fondo Educativo de NALEO (por sus siglas en inglés) inició su campaña nacional a favor del Censo 2010. La campaña ‘¡Ya Es Hora. Hágase Contar!’ representa el esfuerzo más grande para coordinar e integrar a latinos como participantes en el proceso político estadounidense.

De otro modo, recientemente se ha escrito mucho sobre la postura por algunos líderes evangélicos Hispanos de boicotear el Censo. Este grupo minoritario pero vocifero con quienes yo respetuosamente estoy en desacuerdo, creo que comete un error estratégico cuando ligan su lucha para una reforma inmigratoria comprensiva con un boicot del censo. Por supuesto que es importante que tengamos reforma inmigratoria compasiva inmediatamente. Sin embargo, boicotear el Censo de ninguna manera avanzará esta causa. Al contrario, el boicot crea serias y peligrosas desventajas para nuestras comunidades Latinas.
De acuerdo a las publicaciones del Fondo Educativo de NALEO, el Censo tiene implicaciones para tres áreas importantísimas para las comunidades Latinas estadounidenses: a) Representación política...Los datos del censo determinan la cantidad de espacios que cada estado tendrá en la Cámara de Representantes de los EE.UU.
b) Fondos...El censo afecta directamente como se destinan más de $400 mil millones de dólares por año en fondos de gobierno federal y estatal para proyectos de mejoramiento vecinal, salud pública, educación, transportación y mucho más. Por cada latino que no es contado, más de $11,000 serán perdidos durante la próxima década.
c) Derechos civiles...Los datos del censo también se utilizan para proteger nuestros derechos civiles, tal como la aplicación del Acta del Derecho al Voto. Adicionalmente, por ley, la información del censo es confidencial.
Algunos de las organizaciones y líderes religiosos mas respetados en la nación públicamente han endosado participación en el Censo 2010. Líderes como el Rvdo. Luis Cortés y Esperanza US que cuentan con más de 12,000 iglesias y organizaciones sin fines-de-lucros han dicho, “¡Cuéntanos!” Además, en Nueva York, líderes como el reverendo Raymond Rivera, del Centro de Acción Pastoral, y el reverendo David Ramos del Círculo de Liderazgo Latino, han dicho que no participar en el censo puede ser un golpe mortal a muchas de nuestras comunidades. Nosotros estamos unidos con NALEO y la Secretaría de Estado del estado de Nueva York, Lorraine Cortés-Vázquez, animando a todos los Latinos, documentados o indocumentados, que participen en el censo.

A pesar de algunas posturas al opuesto la gran mayoría de la Iglesia Evangélica Latina dice, “¡Ponga a un lado toda fobia. Ya es hora, Hágase Contar!” Basta ya de escondernos en las sombras. Por mucho tiempo muchos en la Iglesia Evangélica Latina han pensando en una agenda pública muy miope. El Censo es una gran oportunidad para mostrar una perspicacia más comprensiva que cubre la totalidad Latina con todos sus retos y promesas. Los cerca de 40 millones de Latinos exigen que se nos cuente ya. Es irresponsable hacer lo opuesto.